El sábado 22 de junio se realizó la primera Marcha del Orgullo Diversa & Disidente en la ciudad de Tandil. En relación a dicho evento compartimos el documento presentado en informe del Consejero estudiantil de la Agrupación Desde el Pie en la Mella en el Plenario del Consejo Académico el pasado 19 de junio.
“Junio es, a nivel internacional, el mes del orgullo LGBTTTIQANBC+. El 28 de este mes, se recuerda/conmemoran las revueltas de Stonewall, una serie de disturbios protagonizados por personas LGBTTTIQANBC+ en un bar neoyorkino de Greenwich Village en 1969, que se recuerda como uno de los hitos del activismo sexodiverso y sexodisidente. Contra la memoria edulcorada de este suceso que ha construido el capitalismo rosa, nosotres reivindicamos el carácter plebeyo de Stonewall, protagonizado por maricas, travestis, tortas principalmente negras, trabajadoras sexuales y pobres, que se levantaron contra el orden sexual represivo, criminalizador y patologizante. Un año antes, en un contexto de fuerte conflictividad política en nuestro país -como lo evidenció el Cordobazo- se creaba en Argentina “Nuestro Mundo”, la primera organización homosexual de América Latina que dos años más tarde, junto con otros grupos como Safo, Eros, Bandera Negra, formarían el Frente de Liberación Homosexual que, como diría Néstor Perlongher, pensaba que liberación sexual y liberación social, debían ir necesariamente de la mano.
Nuestro contexto no es el mismo. Desde el retorno a la democracia los movimientos homosexuales primero, y LGBTTTIQANBC+ después, en el marco del emergente movimiento de derechos humanos, encarnado en la lucha de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, luchó al igual que el feminismo y el movimiento de mujeres, por la ampliación de la ciudadanía y la adquisición de nuevos derechos. De forma insistente esta lucha ha sido utilizada como un respaldo político por organizaciones burocráticas que se arrogan su representación, para beneficiarse de sus alianzas con los gobiernos de derecha y neoliberales. Hemos logrado diferenciarnos de la aceptación, la integración y la complicidad con la que estos sectores hacen un lavado de cara a las medidas represivas de ajuste, utilizando nuestras vidas, deseos y luchas por mejores condiciones de vida. Reconocemos en esta movilización histórica, la fuerza de organizaciones cuya mirada busca repolitizar contextualmente nuestros modos de vida, nuestros placeres y deseos, desde una perspectiva crítica que insiste en imaginar otro mundo radicalmente diferente al que conocemos.
Así, en el marco de estas múltiples luchas, también hemos dado importantes pasos en lo que se refiere a la adquisición de derechos, que lejos de ser nuestro horizonte, son pisos necesarios desde los cuales seguir cuestionándolo todo. En este sentido se conquistaron avances normativos en la salud, como la ley de fertilización asistida, leyes que obligan a las prepagas y al Estado a garantizar el acceso gratuito a la medicación para el VIH; en el campo de la educación hemos logrado la sanción de la ley de Educación Sexual Integral (ESI); la lucha, específicamente de les compañeres travesti, trans y no binaries, ha logrado el reconocimiento de la diversidad de identidades de género, lucha que se cristaliza en la ley de Identidad de Género que permite la rectificación registral sin obligación de acreditar intervención quirúrgica ni terapias hormonales u otro tratamiento psicológico o médico. La disputa continúa y se encarna hoy en la búsqueda del reconocimiento de identidades que van más allá del binario varón/mujer, como la lucha emprendida para el reconocimiento de la identidad travesti en el DNI, hasta los intentos por eliminar la referencia al sexo en el mismo; la ley de Matrimonio Igualitario es corolario también de muchísimos años de lucha que finalmente llevaron a que Argentina se convierta en el primer país de Latinoamérica y el Caribe, y el 15° en el mundo que otorga este derecho; el reconocimiento de la triple filiación que atestigua los primeros pasos en el reconocimiento de familias diversas; y la lista sigue. No podemos dejar de mencionar que el alcance de todas estas conquistas es muy desigual en los diferentes territorios, diferencia que se acentúa también por cuestiones de clase y étnicas.
Sin embargo, como contracara de estos avances normativos, el contexto de avanzada neoliberal y recrudecimiento del conservadurismo moral en el país y la región ha puesto en peligro todos los derechos conquistados en las últimas décadas, y más aún, se han puesto en peligro nuestras mismas existencias. Los crímenes de odio y las manifestaciones más sutiles, pero cotidianas, de discriminación por orientación sexual e identidad de género, y en especial lo que ya podemos calificar como un genocidio travesti/trans, evidencian que nuestros avances distan de ser suficientes, y que debemos replicar nuestros esfuerzos. Esto en un contexto donde las políticas neoliberales aplicadas en el último tiempo, producen un deterioro de las condiciones de vida de las amplias mayorías, y especialmente de las mujeres cis y trans, las travestis y las lesbianas. Se suma a esto la instrumentalización que el gobierno actual ha hecho de las políticas feministas y de la diversidad sexual, mientras el ajuste nos mata. Por otro lado, a partir del debate sobre el aborto en 2018, se recrudeció el activismo de grupos antiderechos -autodenominados próvida- que, bajo el argumento de la defensa de la vida y la familia, buscan restaurar un orden sexual y de género tradicional, patriarcal, heteronormativo y binario, que fomenta el odio a las personas LGBTTTIQANBC+*. Estos movimientos, que nuclean principalmente a sectores hegemónicos del catolicismo y del evangelismo, pero también a numerosas sectores laicos, también han intentado boicotear la aplicación de la Educación Sexual Integral, cuestionando lo que denominan “ideología de género”.
Ante la profundización de un modelo de exterminio económico, del avance intempestivo del conservadurismo moralizante y disciplinador del poder religioso y del recrudecimiento de la violencia policial e institucional que cierran con represión el ajuste precarizador en curso, el orgullo, sabemos, no es suficiente. El cansancio sobre nuestras cuerpas en estos contextos de hambre y muerte, el dolor por les compañeres que ya no tienen voz, se hacen sentir con fuerza. Pero la ira, el dolor y el cansancio se condensan también en rabia. Rabia que nos obliga a organizarnos y que nos empuja a las calles. Que nos empuja a tomar el espacio público, a contaminarlo con nuestras cuerpas castigadas y furiosas, a ensuciarlo con nuestros gritos sucios, con nuestras lenguas insurrectas.”
Sublemas Marcha del Orgullo Diversa y Disidente 2019 ─ Tandil
EDUCACIÓN SEXUAL PARA DESCUBRIR Implementación efectiva de la ESI con perspectiva de género.
¡BASTA DE VIOLENCIA INSTITUCIONAL! Contra la criminalización de nuestras identidades sexuales y de género.
¡TRAVAJO YA! Contra el cisexismo en el ámbito laboral y por el cumplimiento efectivo del cupo laboral trans.
NINGUNE PIBE NACE HÉTERO, NINGUNE PIBE NACE CIS Por infancias y adolescencias libres.
ABORTO LEGAL PARA DECIDIR Las lesbianas abortamos, las transmasculinidades abortamos, les no binaries abortamos.
BASTA DE AJUSTE Al clóset y al FMI no volvemos NUNCA más.
NO HAY MÁS TIEMPO Por políticas públicas de salud integrales para la prevención del
VIH e ITS.
INDETECTABLE = INTRANSMISIBLE Por una nueva ley de VIH.
EXISITIMOS Y RESISTIMOS Contra la violencia médica y jurídica y por el reconocimiento
a las corporalidades intersex.
SIN TRAVAS NO HAY REVOLUCIÓN Contra el genocidio travesti─trans. Al calabozo no volvemos nunca más.
LENGUAS INSURRECTAS Por un lenguaje inclusivo y descolonizado para todes.
NO A LA YUTA DE LAS DIETAS Y LOS TALLES Activismo gordx por cuerpas
insumisas.
ESCUPAMOS SOBRE EL AMOR ROMÁNTICO Por la multiplicación de redes afectivas
rebeldes y responsables.
SEXUALES Y SUBVERSIVES Por el reconocimiento del BDSM, el leather y las prácticas sexuales alternativas.
