En el Aula Magna de la UNICEN, con una amplia concurrencia, la Facultad de Ciencias Humanas llevó a cabo un Acto por el reconocimiento de la inscripción del Archivo del Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo al Registro “Memoria del Mundo” de la UNESCO el pasado miércoles 18 de diciembre. El registro se realizó junto a la Universidad Católica de Córdoba, resultando seleccionadas 27 propuestas provenientes de 14 países. Se trata de un acontecimiento de gran envergadura para nuestra institución y la universidad pública en su conjunto.
Con la presentación de Inés Ceballos dieron la bienvenida en el acto las autoridades de la universidad, de la facultad y del Instituto de Estudios Histórico Sociales (IEHS) y se contó con la presencia especial, en forma remota, de la relatora del Comité regional para América Latina y el Caribe de la UNESCO. Luego de las palabras de apertura, el Dr. Lucas Bilbao, responsable y promotor de esta cruzada, brindó detalles acerca del archivo y presentó imágenes y un video del material en el que está vinculado directamente el Padre Raúl Troncoso (f) quien fuera sacerdote muy querido por la comunidad tandilense.
En la apertura del acto, el Rector de la universidad, Dr. Marcelo Aba, dio a conocer la noticia como “un nuevo hito en lo que son las actividades sobre memoria, verdad y justicia y todo lo que tiene que ver con derechos humanos que lleva adelante la universidad” destacando que “nos llena de orgullo como institución ser depositarios de este material que es testimonio vivo de lo que fue una época particular en nuestro país … y también una responsabilidad que este archivo se haya convertido en Memoria para el Mundo” agradeciendo especialmente a la Dra. Laura Sánchez Alvarado (relatora del Comité regional para América Latina y el Caribe) por su trabajo y acompañamiento en este acto.
Por su parte, la Dra. Sánchez Alvarado, brindó unas palabras resaltando que es la primera vez que se realiza un acto de anuncio en este tipo de registros; explicitó que el objetivo principal de esta iniciativa internacional es “permitir el acceso universal al patrimonio documental e ilustrar cómo el patrimonio de Latinoamérica y el Caribe puede aportar al patrimonio mundial”; destacó que este acervo se vincula con otros conjuntos de archivos que van conformando redes fundamentales ya que aportan a la “historia de la formación de las ciudades y de la ruralidad latinoamericana que estuvo influenciada por una posición que tomó la Iglesia en algún momento”; y, finalmente, revalorizó el “importante papel de las universidades, en especial, el de las universidades públicas como entidades que se están haciendo cargo de los archivos regionales, son custodios, repositorios y son centros de investigación que pueden aportar al acceso universal a la información”. Culminó con las felicitaciones a la institución y a las personas involucradas en asumir tan relevante responsabilidad.
La Dra. Mónica Blanco, decana de la Facultad de Ciencias Humanas, se refirió al reconocimiento y distinción especial que ha recibido el archivo como “un hecho muy significativo que de ninguna manera puede y debe pasar desapercibido. Es para la FCH una obligación que esto se conozca, se destaque, se difunda, se comunique y, fundamentalmente, se comparta.” Destacó la importancia de estos archivos y su carácter público y la envergadura de las acciones y del compromiso institucional, pero también el compromiso personal para que ello suceda. También hizo referencia al orgullo para la institución “sobre todo en estos tiempos donde se cuestiona el rol social de las universidades y se pone en duda nuestra historia, en estos momentos más que nunca dar cuenta de este reconocimiento es una obligación y un hito más en la resistencia y en la lucha.” Finalmente, subrayó la pasión del Dr. Lucas Bilbao quien desde el 2020 recorrió oficinas contando que había un fondo documental muy grande en Santa Fe que era posible y necesario trasladarlo a Tandil para que no se perdiera, y manifestó “cómo decirle que no a quien se mueve desde la convicción, desde el entusiasmo y desde el compromiso, eso afortunadamente es contagioso y por eso aquí estamos hoy, agradecerles desde el lugar que hoy ocupo en la FCH y convidarles e invitarles a seguir trabajando con la misma responsabilidad de siempre para construir esa universidad con compromiso social y, fundamentalmente, defensora y constructora de derechos que nos merecemos”.
Culminó la lista de oradores en la apertura la Dra. Melina Yangilevich, directora del IEHS, quien explicó que este archivo conforma el repositorio del actual Centro de Documentación de Geografía, Historia y Ciencias Sociales del IGEHCS que funciona desde el 2010 como Archivo Histórico Digital comunitario, impulsado por la Dra. Olga Echeverría y en ese entonces enmarcado en la Secretaría de Extensión y Transferencia de la FCH, con una fototeca y repositorio de entrevistas orales ligados a proyectos de extensión e investigación insertos en el IEHS. Destacó el papel de las investigaciones llevadas a cabo en los institutos locales, así como de las realizadas por la “Red Religio” con quien se concretaron dos encuentros en nuestra ciudad en los últimos años. Se refirió también a los antecedentes de este tipo de archivos y su relevancia como “evidencia única de eventos pasados, al mismo tiempo que contribuyen al funcionamiento democrático de las sociedades, son relevantes en la construcción de las identidad de las personas y de las comunidades y son un anclaje en la defensa de los derechos humanos.” Culminó sus palabras señalando que “la preservación de este conjunto documental contribuye a compensar de alguna manera las limitaciones que impone un registro social y político en nuestro país que evidencia limitaciones en la cultura del archivo.”
Para cerrar el acto, el Dr. Lucas Bilbao, investigador del IEHS/FCH e IGEHCS/CONICET/UNICEN, se refirió a las características del archivo del que le habló el sacerdote Elías Musse de Santa Fe en abril del año 2019. Se trataba de documentación que poseía el sacerdote “Pepe” Serra quien había fallecido y su compañera debía mudarse y dejar todo ese material en un lugar resguardado. A los viajes realizados para conocer el material se le sumó la iniciativa del sacerdote Bresci de también donar su fondo documental. Luego de lo cual se sumó, además, parte del Fondo del sacerdote Raúl Troncoso a la colección armada. “Así, llegaron las posteriores consultas con las directoras y directores de los institutos locales para considerar la posibilidad del traslado y resguardo de ese archivo en nuestras instituciones” relató Bilbao, añadiendo, “por más esfuerzos personales que pongamos, es casi imposible emprender proyectos de esta envergadura sin el acompañamiento y respaldo del sistema científico”. Continuó su descripción diciendo que “el material llegó a Tandil el 3 de marzo de 2020 e hizo una primera estadía en mi casa” lugar en el que se ocupó de organizar y catalogar el material incorporando descripciones necesarias de los conjuntos documentales con una mínima referencia de cada uno de los documentos (la fecha, quién escribía, a quién iba dirigido, y mínimamente una descripción del mismo). Pero esto no lo culminó solo, “finalmente el querido amigo Profesional y Técnico de Apoyo Luciano di Salvo fue quien se encargó durante 2021 de la digitalización y edición del material y en octubre de 2022 inauguramos dicho Archivo con un emotivo acto en la Facultad de Ciencias Humanas, dando cuenta de la finalización de un proceso e inicio de una nueva etapa”.
La idea de postular este archivo al Registro Memoria del Mundo de la UNESCO surgió este año con la Dra. Sandra Martín, Directora del Sistema de Bibliotecas de la Universidad Católica de Córdoba que resguarda la colección Carlos Mugica, donada por el sacerdote tercermundista José Meisegeier, quien “nos convocó para postularnos en conjunto con esa universidad y lo hicimos en la categoría ‘lucha por los derechos humanos’. Compartimos material del mismo período e idéntica temática, así como los objetivos de nuestras instituciones: conservarlo y ponerlo a disposición de investigaciones científicas. A finales de noviembre se nos notificó que la presentación conjunta había ingresado al Registro del Mundo al que nos habíamos postulado” explicó Bilbao.
A continuación comentó brevemente qué fue el Movimiento de Sacerdores para el Tercer Mundo, que se trató de un agrupamiento de sacerdotes católicos argentinos que como tal tuvo su existencia entre 1967 y 1976; así como el contenido específico del archivo. El mismo integra “más de 7000 fojas provenientes de los fondos y colecciones mencionados, cuyas fechas extremas van de 1966 a 1983. Dentro de la tipología documental la que prima es la correspondencia y esta incluye copias de notas, cartas y consultas que el Secretariado hacía a los responsables y coordinadores de las regionales y diócesis, así como sus respuestas. También contiene documentos de trabajo, conferencias, circulares, folletos, comunicados públicos y telegramas, más de 500 recortes y artículos de prensa, entre otros. En total se registra correspondencia, en su mayoría de sacerdotes y algunos obispos, proveniente de un total de 46 ciudades de 14 provincias y de la entonces Capital Federal. En términos eclesiásticos se referencian un total de 29 de las 46 diócesis existentes en esos años y contempla las 8 regionales en que se organizó el Movimiento. Los documentos están escritos en su mayoría a máquina de escribir o a mano, por lo que es posible apreciar anotaciones, tachaduras, enmiendas en los márgenes.”
Asimismo, el archivo cuenta también con varias colecciones, dos de ellas son: “una es un conjunto de copias de documentos producidos por distintas agencias de inteligencia dependientes de las policías provinciales y las FF.AA. y la otra es la que denominamos ’Cartas de la cárcel’, y se trata de la correspondencia que envió el sacerdote Raúl Troncoso a sus familiares y distintas instituciones eclesiásticas y judiciales y aquella que le fue permitida ingresar al penal, proveniente también de familiares e instituciones de la Iglesia entre 1976 y 1981.”
Para finalizar sus palabras, destacó las potencialidades de los fondos y colecciones del Centro de Documentación del IGEHCS, agradeció “a las autoridades de la Universidad, la Facultad, el IEHS y el IGEHCS y en ellas, a las y los colegas de aquí y de otras universidades … He descrito aquí los trazos más importantes de un Archivo que hoy fue reconocido por la UNESCO como Memoria del Mundo. Quedan aún numerosos desafíos y campos de acción abiertos para trabajar con los documentos y lo que su concentración, digitalización y manipulación implican. Pero lo cierto es que estos fondos resultan invalorables puertas de entrada para el quehacer de la investigación histórica sobre un campo de estudios que continúa en expansión … Finalmente quiero remarcar la igualdad de oportunidades que da la Universidad pública. Los hijos de los trabajadores también pudimos llegar a la Universidad. Hoy trabajo aquí y en el sistema científico. Hoy soy testigo y partícipe de esto que estamos celebrando. Esto es la Universidad pública. Esto es lo que defendemos y defenderemos, siempre.”
Con un cierre muy emotivo el público celebró de pie con un aplauso cerrado este gran reconocimiento que fue coronado con un breve video donde el padre Raúl Troncoso declara como testigo en una causa de lesa humanidad.
Nota en #RUN : https://www.instagram.com/abraunicen/reel/DD7mCV6zldl/
Nota Universidad Católica de Córdoba: https://www.ucc.edu.ar/notas/archivo-sacerdotes-tercer-mundo-patrimonio-mundo-unesco
Nota diariomardeajo.com.ar: https://www.diariomardeajo.com.ar/2024/12/10/la-unesco-declaro-patrimonio-del-mundo-al-archivo-de-sacerdotes-para-el-tercer-mundo-que-resguarda-la-unicen/